Muchas veces usted escuchó mencionar, en los relatos de los partidos, la denominación de "punta de lanza", específicamente haciendo referencia al centro delantero.
Muchas veces usted escuchó mencionar, en los relatos de los partidos, la denominación de "punta de lanza", específicamente haciendo referencia al centro delantero.
En la década de los años 40, Brasil tuvo un atacante formidable: Ademir Marques de Menezes, goleador nato en su oficio el de centro delantero, vistiendo la casaca del Vasco Da Gama y la selección Brasileña, aunque se inició en el Sport Recife, y una temporada en el Fluminense.
Su virtud de infalible definidor le valió el mote de "PUNTA DE LANZA", apodo que forma parte del diccionario del lenguaje futbolístico mundial.
Asimismo, su prominente mandíbula hizo que le pusieran el apodo Queixada, que significa “quijada”.
Ademir fue goleador en el Mundial de 1950, con 7 tantos, logro que pasó desapercibido a raíz de la tremenda desazón tras el "maracanazo". En 1949, fue autor de 54 goles en 49 partidos.
Tanta fue la preocupación que generaba el nivel de juego de Ademir como temible atacante que obligó a crear la figura del zaguero central de manera a atenuar su potencial que causaba estragos en la defensa contraria.
Ademir "Punta de Lanza" de Menezes, un héroe civil que legó Brasil a Sudamérica y el mundo… Falleció en Rio de Janeiro el 11 de mayo de 1996. Nació el 8 de noviembre de 1922, en Recife, Pernambuco.
