El uruguayo Edinson Cavani, fichado por el París Saint-Germain por 64 millones de euros, es la mejor noticia del equipo en la primera parte de la temporada
Cavani deslumbra en el PSG
El uruguayo Edinson Cavani, fichado por el París Saint-Germain por 64 millones de euros, es la mejor noticia del equipo en la primera parte de la temporada; mientras que los argentinos Javier Pastore y Ezequiel Lavezzi, y el brasileño Lucas Moura no han ofrecido el nivel esperado.
Cavani, que llegó en julio procedente del Nápoles, fue el regalo de despedida del brasileño Leonardo como director deportivo del PSG. En cinco meses el uruguayo, modelo de integración profesional, se ha convertido en imprescindible en el frente de ataque junto con la indiscutible estrella del equipo, el sueco Zlatan Ibrahimovic.
A diferencia de lo que muchos podían esperar, ‘Ibra’ no ha tenido problema en compartir ‘su’ espacio y los resultados de la asociación sueco-uruguayo no han podido ser mejores para el equipo de la capital de Francia, lider del campeonato y clasificado para octavos de final de la Liga de Campeones.
En 24 partidos en todas las competiciones Ibrahimovic ha logrado 23 goles, mientras que Cavani ha hecho 18 en 23 encuentros. Entre ambos han inscrito el 64% de los tantos del PSG este curso.
El mérito del maridaje corresponde en gran parte al técnico parisino Laurent Blanc. El antiguo jefe de la defensa de los Bleus no era la primera opción para suceder a Carlo Ancelotti, que fichó por el Real Madrid, pero ha demostrado su capacidad en los cuatro primeros meses de competición.
Después de sondear sin éxito a los técnicos más reputados del panorama europeo, los propietarios del club francés optaron por Blanc, que llegaba tras una mala experiencia al frente de la selección francesa en la Eurocopa-2012.
Después de haber comenzado sin éxito con un dibujo táctico conservador de 4-4-2, cambió a un 4-3-3 más afín con su filosofía de juego y la apuesta le dio resultado. Las estrellas del plantel se sintieron cómodas con la posibilidad de contar con mayores opciones en ataque y el equipo ascendió hasta la primera posición del campeonato francés.
Otra de las claves del equipo es la consolidación de un centro del campo formado por el francés Blaise Matuidi y los italianos Marco Verratti y Thiago Motta. Mientras que el primero es un luchador incansable, sus compañeros se ocupan de dar el ritmo adecuado al equipo.
Pero no todo brilla el equipo francés. En el partido del domingo en el Parque de los Príncipes, empate (2-2) ante el Lille, se notó en exceso la baja de Cavani, que viajó a su país unos días antes del descanso de Navidad debido a asuntos personales.
Ibrahimovic cumplió con su cuota, marcando un tanto de falta directa, pero no tuvo un acompañante a su altura. Ni Lucas Moura ni Lavezzi congeniaron con el gigante sueco de la forma en la que lo ha hecho ‘el Matador’.
Lucas, de sólo 21 años, ha progresado desde su llegada en enero, pero su rendimiento siempre ha sido interminente, alternando grandes detalles con partidos en los que pasa desapercibido.
El caso de Lavezzi es diferente. Su actitud es siempre positiva y en su bagaje no faltan las ganas, la agresividad y la lucha, pero su rendimiento no se acerca al de la pareja estelar del equipo. Le falta gol y clarividencia.
Más criticado es su compatriota Pastore. Ha pasado en dos años de indiscutible estrella del equipo a suplente. La indolencia y la falta de regularidad han condenado a un futbolista con una calidad extraordinaria.
Por Nicolas PRATVIEL/AFP
Foto: AFP
Edición: conmebol.com