Perseverante. Así se describe Valentina Restrepo. Desde sus inicios en el fútbol, esta deportista de Envigado F.I. lleva el título de goleadora y no es para menos: en su reciente participación en los Juegos Bolivarianos se convirtió en la máxima anotadora de la Selección Colombia Sub – 20. ‘Valen’, como le dicen sus allegados, nos habló de sus inicios, su preparación, su participación en la Liga Femenina y lo que la motiva a seguir en este deporte.
¿Dónde nace su amor/pasión por el fútbol?
R// Mi familia es muy futbolera, pero el principal motor fue mi abuelita Gladys que ahora está en el cielo. Ella era una verdadera hincha del Deportivo Independiente Medellín: me llevaba al estadio, cada vez que jugaba nos reuníamos para ver el partido, y así nos contagió a todos los nietos del amor por el fútbol. Además, soy la única mujer entre todos mis primos y cuando me reunía con ellos, lo único que querían era jugar fútbol.
¿Cómo llega Valentina a las canchas?
R// Precisamente, un día estaba jugando fútbol con mis primos y me vio un familiar que, para ese entonces¸ era el abogado de la Liga Antioqueña de Fútbol. Él me hizo el vínculo con Formas Íntimas, me presenté y ahí comencé mi proceso.
Se consolida la Liga en nuestro país y usted participa con Envigado F.I., ¿cómo fue esta experiencia de jugar con el título de profesional?
R// Fue una experiencia buena. Todo deportista sueña con ser profesional y la vida me regaló esto a muy temprana edad. Disfruté los minutos que me dieron en la cancha, me lo gocé y grité mi primer gol como profesional con amor y pasión que es lo que siento por este deporte.
Su última participación fue en los Juegos Bolivarianos con la Selección Colombia sub – 20. Allí, el equipo deja el oro en casa, pero además usted se convierte en la máxima anotadora, un reconocimiento que no le llega por primera vez.
R// Mi meta es ser siempre goleadora. Lo fui con Formas Íntimas, con la Selección de Antioquia, pero me faltaba serlo con la tricolor puesta. Cada vez que lo logro, me lleno con la satisfacción de cumplir con mi trabajo que es hacer goles. Es dar ese último toque a lo que mis compañeras crean estratégicamente desde atrás. Siempre lo he dicho, si no hay un trabajo en equipo, yo no puedo vencer el arco.
¿A quién le dedica los goles?
R// A mi familia. Siempre han estado pendientes de mi proceso, me dan apoyo incondicional, están conmigo en todo momento y me dan la mano para seguir adelante. Se los dedico a mi pareja y a toda Colombia. En los Juegos Bolivarianos fue fundamental el apoyo de toda la población de Ciénaga, por ejemplo.
¿Hubo algún momento difícil que la pusiera a dudar sobre la carrera como futbolista?
R// Sí. A mediados de 2016 me empecé a sentir estancada en el fútbol. Para ese entonces, este deporte no tenía el apoyo suficiente, así que decidí buscar un trabajo adicional y el fútbol quedó en un segundo plano. Luego, me enteré del primer campeonato de Liga Femenina y sabía que quería estar allí. No era nada seguro, hasta que esa esperada llamada llegó y ahí todo cambió. Las garantías de profesionalizarme no me hicieron dudar en renunciar a mi empleo y volver de lleno a las canchas. El amor por este deporte es difícil de romper.
¿Qué les diría a esas mujeres que encuentran en las canchas su pasión, pero que no se han iniciado en el deporte?
R// Sigan sus sueños. Si su anhelo es estar toda una vida jugando fútbol, luchen por eso. Nada es fácil, pero con amor, disciplina, responsabilidad, humildad y sobre todo perseverancia, todo se puede alcanzar.
¿Cuál es el jugador(a) que la inspira a seguir entrenando, que admira y por qué?
R// Yo me identifico con Falcao. Admiro su humildad, su manera de jugar y me encantaría conocerlo. Cuando se lesionó, muchos no lo apoyaron, pero él siguió luchando por volver a ser el 9 de antes. Lo consiguió gracias a su disciplina y perseverancia. Ahora, el ‘Tigre’ ruge con la misma fuerza.
Fuente: http://dimayor.com.co
