Proezas impensadas para la época, de una visión soñadora que primero se propuso ganar la por ese entonces Copa Libertadores de América, a lograr luego la Intercontinental en 1980, depués reconocida como Copa Mundial de Clubes.
Así fue el sueño del Olimpia que se empezó a gestar en ese glorioso 1979, acaso uno de los mejores años para el fútbol paraguayo, pues también logría quedarse con la Copa América de selecciones, teniedo como base al plantel Decano del balompié guaraní.
Olimpia rompió el molde y todos los esquemas, de la mano de grandes jugadores, un legendario entrenador como Luis Cubilla y acaso el más glorioso dirigente deportivo que tuvo el Paraguay, su presidente Osvaldo Domínguez Dibb.
Y este martes 2 de marzo fue una noche de festejos para el Olimpia, de reencuentros, de celebraciones, una constelación de estrellas del fútbol reunidas en su sede de la capital paraguaya Asunción, para rememorar la conquista, hace38 años del campeonato Mundial de Clubes.
El acto contó con la presencia del Presidente de la CONMEBOL, Alejandro Domínguez, por mucho tiempo directivo del cuadro franjeado, un club que es tricampeón de América.
La ocasión fue propicia para entregar pergaminos de reconocimiento, primero al Presidente de esa gesta, Osvaldo Domínguez, y luego a cada uno de los jugadores de ese plantel presentes, y otros representados por hijos y parientes.
También fue descubierto un monolito, que representa la gesta de la Copa del Mundo obtenida por el Rey de Copas paraguayo.
El actual presidente del Olimpia, Marco Trovato, dio la bienvenida y se encargó de dar los reconocimientos a cada uno de los homenajeados, agradeciendo por la hazaña de grandes ex jugadores reunidos en la velada.
A su turno, el Presidente de la CONMEBOL, gran propulsor, para la aprobación por parte del Consejo de FIFA, de la propuesta de CONMEBOL de reconocer títulos de Copas Intercontinentales como Mundiales de Clubes, expresó su satisfacción de ser parte de la familia del Olimpia.
«El ser ratificados como Campeones del Mundo, es un reconocimiento promovido desde mi gestión como Presidente de CONMEBOL, un reconocimiento que tardó en llegar, pero que llegó, así que muchas felicidades grandes campeones y en especial a mi ídolo personal, el señor Osvaldo Domínguez y a mi madre, grandes gestores de estos logros», remarcó notablemente emocionado.
Luego fue el propio Domínguez, que en un acto simbólico, le entregó al capitán de ese entonces, Hugo Ricardo Talavera, el trofeo original de la Intercontinental y del Mundo.
La noche tuvo otras hondas palabras de emoción de jugadores representativos de la época, Solalinde, Michelagnoli, Talavera, Almeida, Delgado, entre otros, además de la hija del ex entrenador Luis Cubilla, antes de cerrar los homenajes.
– El título –
Con goles de Alicio Solalinde y Miguel Michelagnoli Olimpia derrotaba 2-1 al Malmö sueco, un 2 de marzo de 1980, y escribía su nombre entre los grandes del fútbol mundial.
Meses antes, el 18 de noviembre de 1979, en el Malmö Stadion de Suecia, Olimpia derrotaba por 1-0, al mismo rival a domicilio, victoria que lo ratificó en Asunción.
Pero para llegar a la pelea por el título mundial, Oimpia fue campeón de América, arrebatando el tricampeonato de la Copa Libertadores al Boca Juniors, en 1979, ganó el encuentro en Asunción por 2-0, para luego empatar en Buenos Aires y consagrarse campeón por primera vez en su historia, logrando convertirse luego en uno de los pocos clubes en el mundo en haber conquistado todos los campeonatos posibles en un año, en todos los niveles existentes (con 4: copa Intercontinental, Interamericana, Libertadores y título local), y obteniendo el primer título para un país diferente a Argentina, Brasil o Uruguay que hasta el momento habían predominado en la copa.
